21 de marzo de 2011

TIEMPO DE UNA FELIZ ACEPTACION DE “SER MUJER”

Más de 2000 mujeres asistimos a aquel congreso invernal en la costa argentina, 10 años atrás.

La oradora lanzó una pregunta: “ Quién de uds. alguna vez, renegó de su condición de mujer? Continuó: “Quién, en alguna ocasión, aún con el pensamiento, dijo que era mejor o más fácil ser hombre?” y agregó: “póngase de pie”.

El sonido de las butacas resultaba interminable y mi sorpresa también. A mi alrededor TODAS las mujeres se habían puesto de pie excepto una joven y yo. Consternada, miré a mi alrededor y luego hacia las gradas repletas que, después de la propuesta, tenía como protagonista a la totalidad del cupo parado sobre sus plantas.

Pensé que quizás no había escuchado bien la consigna, cabía la posibilidad de no haber sido del todo honesta… Debía encontrar la explicación de por qué yo permanecía sentada…

Repasé lo más rápido que pude mi historia personal: desde que aparecen los recuerdos de mi vida, vi con claridad que me hacía feliz ser “nena” porque podía jugar a ser mamá, a ser esposa… me gustaban los vestiditos y zapatitos de mujer…y las labores culturalmente femeninas. A medida que fui creciendo mi condición de “señorita” me deslumbraba, fascinación que aún hoy conservo por saberme mujer.

Ya adulta, me he dedicado a instruirme sobre el universo inagotable de las mujeres y me enorgullece pertenecer a él.

Como soy partidaria de hacer listas con las fortalezas y debilidades de cada situación, esta vez no fue la excepción. En un listado mental escribí los motivos por los que me gusta ser mujer, y en el otro las razones por las que me gustaría ser hombre.

El saldo: uno de los registros estaba y sigue estando vacío…

Admiro los atributos del hombre y me maravilla ver cómo Dios lo ha dotado de notables potencialidades, pero no deseo estar en su lugar.

La sabiduría del Creador es tan perfecta que hizo al hombre y a la mujer, diferentes pero complementarios por lo que sería una apreciación un tanto pueril, y con poco fundamento, pensar que por ser mujer se está en desventaja.

Mujer: Entiendo que las experiencias de vida pueden llevarte a pensar que lo hasta aquí he escrito es utópico, de hecho casi 2000 mujeres lo creyeron así en aquella convención, pero te animo a que hagas tus propias listas comparativas.

Si no hallaste justificación para decir que “a los hombres les tocó la mejor parte”, “ser hombre es tener más posibilidades” “la vida es más fácil si se es hombre” o “por qué no habré nacido hombre? ” , entonces podrás sentarte en la cómoda butaca de la aceptación categórica de tu condición de SER MUJER… y disfrutar!

5 comentarios:

JUDI dijo...

hola susy!!!!!!!!! que alegria me da este espacio...tan bendecido ....tan esperado..... me encanto este nuevo tiempo que nos presentás..... me invitaste a hacer un recorrido por mi vida y también siempre ME GUSTÓ LA IDEA ORIGINAL DE DIOS DE HACERME MUJER.... NUNCA RENIEGO DE MI LUGAR EN LA CREACIÓN ... ME ENCANTA SER MUJER...ESPOSA ...MAMÁ...AMIGA... HERMANA...HIJA... cada rol tan difernete pero tan particular... aunque no tenía registro alguno de que esto fuera así...!!! AHHHHHH ME ENCANTA SER PRIMA TAMBIÉN.... ( susy y algunos más saben de que hablo...ja ja....) bueno perdón retomo mi comentario.... SOBRE TODO ME ENCANTA SABER QUE SOY PRINCESA... HIJA DEL REY!!!! Y DE ESTO DISFRUTO MUCHO CADA DÍA.... una REINA me enseñó a VALORARME COMO MUJER...Y DESDE HACE UN TIEMPO CAMINO MÁS LENTO POR LA VIDA ,SIEMPRE MIRANDO HACIA ADELANTE Y HACIA ARRIBA...DISFRUTANDO DE LA VIDA Y DE MI LUGAR EN LA VIDA.... muchas conocen a esa REINA ...SE LLAMA SUSY.... Y HOY QUIERO BENDECIRLA!!!!!...

MARGA dijo...

Hola su!!!!!me encantó entrar y encontrarte de nuevo, después de un tiempo de silencio, y sííí al leer lo que escribiste en el blog, me siento agradecida con Dios, por haberme creado mujer,me siento agradecida con Dios por tenerte,y haberme hecho descubrir, el potencial que escondía.Me siento agradecida de ser mujer, porque se nos compara a un vaso frágil, pero también se nos ve fuertes y capacitadas para enfrentar el embravecido mar de la vida.GRACIAS SEÑOR POR HABERME CREADO MUJER!!!!!! GRACIAS SUSY!!!!!TKM

Anónimo dijo...

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Silvia dijo...

Yo me hubiera parado…..
Ante la pregunta de si alguna vez pensaron que quisieran ser hombre, mi respuesta es sí…….
No me digan que yendo por la ruta, en el sur por ejemplo, cuando estamos separadas por 60 km o más de un sanitario y luego de comer opíparamente un desayuno buffet con algunos jugos de riquísima naranja, algún yogurt bebible y dos tasas de café cortado, nos inunda la desesperación por desembarazarnos de todo ese líquido bebido, nos duele el hipogastrio, y ya nos parece que no podemos contener más, nos dan escalofríos y más dolor!!!!!! Ya casi no aguantamos más, pero no nos animamos a bajarnos del coche, porque claro, no estamos muy seguras de que no se nos vea nada desde la ruta, además de lo primitivo de la maniobra que debemos hacer para evacuar (Demostración de que pertenecemos al reino animal) y corriendo el riesgo de salpicaduras odiosas e indeseables, bueno….. No me digan que no les dio un poco de envidia, la fácil maniobra de ir detrás de un arbusto.
A ustedes no? Y bueno….A mí sí y a mucha honra.
A mí también me encanta ser mujer!!!! Aunque de chica las muñecas me parecían unas pesadas, síiiii!!! Jugué a la mamá, maestra, etc., etc. Pero me divertía más cuando estábamos en la quinta, salir con mi hermano y amigos y amigas a cazar ranas, treparnos a los árboles, había uno de mora que vivía pelado por nosotros, jugábamos a las escondidas hasta tarde a la noche, escondiéndonos en las sombras. Los varones eran más arrojados, se arrodillaban en los puentecitos, por arriba de los cuales pasaba el tren y ponían monedas de un peso (La de la cara de la libertad con el gorro frigio) y cuando éste pasaba, quedaban chatas y hermosas. Ahora en Estados Unidos hay unos aparatos que planchan monedas de un centavo y le imprimen dibujos, (Unos copiones, mi hermano y sus amigos ya lo hacían hace 48 años). A las nenas nos fascinaba verles la destreza que desplegaban, y obvio, muchas de las monedas nos la regalaban haciéndose los galanes. Jugábamos todo el día, como nos divertíamos!!!, alrededor de la casa había campos con vacas, como nos gustaba ir a molestarlas, en la corrida siempre alguna torta de vaca pisábamos y… eran gajes del oficio. Cuando llegábamos a la casa, mi mamá para que no ensuciáramos todo nos “mangueriaba”en el jardín que era enorme, lleno de pinos, cedros, rosales y toda flor que se les ocurra, y también de agujeros de sapos, que nos invitaban a llenarlos de agua, con la misma manguera con la que nos habían rociado, pobres sapos!!, salían los bichos con un signo de interrogación en la cara y eran combatidos con potentes chorros por todos lados. Tengo recuerdos muy gratos y muy divertidos de esa época, no era muy femenina, pero me encantaba ser mujer y también me gusta haber crecido, y convertirme en una dama, y amo a mi hija que desde el pañal fue siempre superfemenina, cauta, muy dulce, bueno,… dulce yo era, me lo decían,… y también muy mimosa, ese era privilegio femenino en mi época, y yo lo disfrutaba, siempre tenía maestras que me amaban y a mí me parecía que un poquito más que al resto.
Y ahora, que duda cabe? Amo ser mujer, bastante más femenina de lo que fui en mi infancia, ni loca me gustaría ser hombre, pobres…. Los cargan de responsabilidades desde que nacen, Dios mismo, la cabeza son ellos, con TODO lo que implica. La maternidad que es irremplazable y se enteran en segundo término que van a ser padres. Y siendo madre de una mujercita adolescente por fin me deleito en sus locuras, vamos logrando el equilibrio, que bueno que pueda usar con sus problemas parte de mi experiencia, y verme reflejada en algunos gestos y algunas actitudes, y que bueno que en otras circunstancias se desenvuelva justamente de manera opuesta a lo que yo lo hubiera hecho. Me hace feliz verla disfrutar de ser mujer y ser adolescente. Como creció mi bebé. La amo!!. Silvia.

Anónimo dijo...

Cuando no era cristiana, renegaba el ser mujer, mi papa preferia a mis hermanos varones que a mi, ellos tenian todos los privilegios y libertades, yo estaba recluida en la casa....

Luego creci, y me vaerguenza decir que me empezaron a atraer las mujer pero yo no queria ser mujer, queria ser varon, asi que empece a actuar como uno, y a escondidas me vestia masculina.

Pero, ahora que soy hija de Dios, perdonada, lavada por su sangre, transformada, he entendido en que ser MUJER, es una bendicion.

Hoy puedo decir que estoy agradecida de que Dios me haya hecho mujer, estoy complacidad, fascinada y feliz de serlo, una mujer muy femenina, casada y amada por un hombre maravilloso.

Ya no me averguenzo.

SOY UNA MUJER, Y ES UNA BENDICION DE DIOS.

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